COVA DES COLOMS

 Por Rafael  Minguillón Forteza.

     Nuevo Año y ya estamos con las marchas puestas. Después de las comilonas toca gastar energías y recuperar figura, pero lo hacemos con conocimiento y empezamos por una cavidad sencilla, no sin algo de escalada y sufrimiento, eso es bueno para estirar el cuerpo. Podemos decir que la cavidad tiene dos salas independientes y diferenciadas. La primera, por la que se accede, tiene grandes columnas, más anchas que altas, ya que el techo apenas tiene 2 m en según que sitios, suelo de mucho polvo y cagarringos de cabras, éstas acceden por una pequeña apertura a la altura de un cortado que da a un "torrentó", también hay un buen boquete e impresionante, bajo él una cantera de antaño a cielo descubierto. La segunda sala, se accede por otro agujero. No tiene polvo, es húmeda y está plagada de columnas estalagmíticas, coladas parietales, oquedades y gateras, hay salas superiores, que se pueden acceder por un extremo de la sala, escalando y oposicionando el cuerpo, también por otro agujerito, ya llevamos unos cuantos agujeritos.


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