SALT DE VISTAMAR. Valldemossa. 2014

         
                                Félix, Gustavo, Pau, Nuria, Xisca y Rafael.

     Continuamos con la tanda de Torrentes con grandes saltos. Hoy toca el torrent Salt de VistaMar. Algo rápidos nos adentramos en el hotel abandonado del mismo nombre, ante majestuosidad fachada tiramos por la izquierda, dando al cauce del torrente. Destrepamos durante unos minutos llegando a la vertical más absoluta, dónde empieza la verdadera aventura. El salto es visible desde la carretera que va hacia el puerto de Valldemossa.



          Seguimos con el buen tiempo a pesar del mes en que nos encontramos, es ahora cuando hemos de aprovechar su descenso, reconocer el terrerno par cuando llueva saber el estado de los anclajes.
          Es evidente que a cada uno, a su manera, le impresiona el primer descenso, el cangelis, los nervios y “qué hay ahí abajo”  es la tónica de la mañana. Aquí estamos de buena mañana: Pau, Xisca, Félix, Gustavo, Nuria y Rafael.
          Pau, irá abriendo el camino y preparando la segunda tanda de rapel, mientras el resto espera. Comento que el que quiera bajar con compañero, no hay problema y podrá sentir cómo es la cosa. Enseguida todos quieren bajar en pareja. Así que, turno de; Félix y Nuria. -Qué chulo Rafa, es una pasada. Dice Nuria. Ahí está Félix como un profes-sional al lado suyo. Luego les toca el turno a Xisca y a Gustavo. Alegrías, jolgorios y chupi-chupi guay, he, he. La novedad les encanta y quieren repetir. Les mola cantidad y quieren ir repitiendo cuando se pueda. Ahí quedan las fotografías.
          Después del primer salto de 44m, resalte de 35m. Damos a una gran marmita, bueno, inmensa marmita. Nos acercamos a su extremo y otro salto en rampa diagonal izquierda damos a la parte más estrecha de éste torrente, caben perfectamente cuatro o cinco personas, pero es estrecha. Y de aquí al final, un salto de 55m, que empiezas en rampa para los últimos metros hacerlo en aéreo, si no vas con cuidado puedes enredarte con las ramas de una grandiosa enredadera.
          Una vez abajo, la emoción del barranquismo ha terminado. Decidimos comer algo y acto seguido empezar el destrepe de unos 25´ hasta llegar a la unión con el del Lli, seguiremos bajando siguiendo un sendero antiguo, que al poco nos dejará en la carretera, prácticamente en el puerto de Valldemossa. Es bastante temprano, son las 14h. Un piscolabis y para casa a cambiarse, a ponerse guapo y a la fiesta marchosa que nos tendrá hasta el alba despiertos, bailando y cantando.

MATERIAL:
  3 cuerdas de 50 mts, una extra  (según número de pax)

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