Segundo
día de actividades, ni mal tiempo, ni agujetas, nos paran en nuestros placeres.
Estamos Pilar, Félix, Gustavo, Teresa y un servidor, Rafael. Nos dirigimos a
cala Romántica a visitar una hermosa cavidad, con gran cantidad de
espeleotemas, columnas y columnatas inmensas, macarronis y hermosos fósiles por
doquier.
La
mañana se presenta revoltosa, turbia en el ambiente, llueve a deshoras y así, a
primeras de cambio, nos cae granizo y agua nieve. Llegamos al sitio y visitamos
la playa desolada. El paisaje es hermoso, a diferencia grande de cara al
verano. Seguimos caminito como cual borreguitos a dicha cavidad, una balma
próxima a la depuradora.
Al
arribar, el tiempo mejora, sale el sol, qué gustito. Ahora a papear, ponerse el
mono, que aquí hay que arrastrase y hay mucho polvo los primeros metros.
El personal flipa por dónde y cómo se
accede, no se lo creen, pero han de confiar en mi. Ya metidos, -Oh... qué
pasada.. -Qué grande... -Qué columnas, es increíble.. -Gracias rafa por
traernos aquí, esto es una maravilla... -Mira esos macarronis (fistulosas)...
Van pasando las horas, no hay prisa, hay que hacer fotos.
Una vez extasiados y embebidos al
centímetro la cueva, emprendemos salida. Afuera brilla un sol espectacular.
Aprovechamos para recorrer el sendero a ras del risco. Playa, mar y campo y
buena compañía, hoy es un buen día.
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