GRUTA DE L’AMO EN MARTÍ
 (Manacor, Mallorca)

Por José Bermejo, 2013

Resumen

En este trabajo, presentamos la topografía tanto terrestre como marítima de la cavidad, así como una detallada descripción.



Introducción

               Cavidad de magnitud T|III, situada en las proximidades de Caló d’en Rafelino, (Cala Morlanda). El lago que alberga en su interior y el  fácil acceso, hace que sea  muy frecuentada, especialmente en el verano para bañarse en sus aguas.

El acceso terrestre a la cueva  se hace a través de la entrada natural que se formó tras el hundimiento que  hizo aflorar la gruta.  Para el acceso marino, es necesario equipo de buceo y puede hacerse tanto desde la zona sur de la Sala des dos Nivells, como del Llac de sa Morena.

Se trata de una cavidad marina terrestre, siendo posiblemente conocida desde tiempos prehistóricos, de hecho, forma parte del listado de monumentos de Manacor, estando considerada monumento arqueológico.  Actualmente es bien visible la incidencia antrópica de la cueva, en la que se aprecia un importante trabajo de acondicionamiento para usos  que desconocemos debido a la falta de documentación existente.




Entorno geológico

               La Gruta de l’Amo en Martí, se encuentra enclavada en la llamada marina del Llevant, concretamente sobre un acantilado de 10 m de altura compuesto por materiales del mioceno superior.

Descripción

Coordenadas: 531625 4378620  DATUM ETRS89
Altitud: 10 m.

El acceso terrestre a la cueva  se hace a través de la entrada natural que se formó tras el hundimiento que  hizo aflorar la gruta.  Para el acceso marino, es necesario equipo de buceo y puede hacerse tanto desde la zona sur de la Sala des dos Nivells, como del Llac de sa Morena.

Figura 1: Sala Escaleras de acceso a la Sala des dos Nivells  (Foto J. Bermejo)

Esfondrament

               La vegetación formada principalmente por higueras y zarzas, ocupan gran parte esta zona de la gruta, ocultando especialmente la  zona este. Se trata del típico colapso cenital que formó un gran  agujero en la superficie de 9 x  11 m,  del que sobresalen de el las higueras que crecen en el interior,  a la vez que hace visible a la gruta. Posteriormente, la mano del hombre acondiciono la zona, desplazando no sin gran esfuerzos los  bloques de piedras y construyendo una escalera (Figura 1), que  comunica con  la Sala des dos Nivells.

Sala des dos Nivells

                    Como mencionábamos con anterioridad, la cueva se encuentra en algunos lugares acondicionada por las manos del hombre, siendo esta sala el lugar en el que más  se ha alterado nivelando la superficie del suelo en dos niveles separado entre si por un muro de piedra.

Figura 2: Sala des dos Nivells (Foto J. Bermejo)

El nivel superior tiene unas dimensiones aproximadas de 7 x 8 x  4 m mientras que las del inferior son  6 x 7 x  3 m. En los dos  casos, un macizo estalagmítico (Figura 2), transcurre de Norte a sur por el lado oeste separándola de Sa Ramp, mientras que otro lo hace por el lado este en el nivel inferior.  Destacar la claraboya artificial de menos de un metro de diámetro  que se encuentra en el nivel superior de la sala y justo encima de la pared que divide los dos niveles. La utilidad que se le pudo dar pudo ser la de extracción

Figura 3: A), Gours de diferentes tamaños.  B) Cúpula de corrosión.  C) Formas de corrosión cenital en el Llac de sa Morena (Fotos J. Bermejo)

de humos ya que esta zona de la gruta se encuentra razonablemente iluminada con la luz que entra a través de la entrada natural. Otra claraboya de características similares se encuentra en  la vecina Cova dets Amagatalls, a la que posiblemente se le daba el mismo uso. Rica en espeleotemas variados, en la sala destacan los enorme macizos  estalagmíticos que la separan tanto de Sa Ramp por el oeste, como de la Sala Occidental, por el este. Al menos una cúpula de corrosión (Figura 3B), alberga en la zona norte de la sala. Próximos a una  charca al sur de la sala  se encuentran unos pequeños
gours, que se alimentan con el agua del mar que golpea junto a ellos al mismo tiempo que los va modelando (Figura 3A), dicha charca  permite la comunicación con el mar a través de la Galeria de sa Creu.

Sa Rampa

               Paralela a la sala anterior, se encuentra esta sala, en la que abundan gran cantidad de formaciones, especialmente en la zona NO, con unas dimensiones aproximadas de 11 x 25 x  4 m. La zona norte es la más laberíntica además de se la más ornamentada, mientras que en la sur,  los espacios son más abiertos,              

Figura 4: Cruz en la Galeria de sa Creu (Foto R. Minguillón)

limitando con el agua que entra en la cavidad procedente del mar. Todo el extremo este de la sala, se encuentra ocupado por el macizo estalagmítico que la separa de la Sala  des dos Nivells.

Pou Nord

               Se trata de una pequeña salita de 5 x 6 x  3,5 m,  situada al NO de la cueva y carente de interés, a la que se accede a través una boca pequeña.

Sala Occidental

               Con unas dimensiones de 11 x 8 m, se accede a ella desde la Sala  des dos Nivells, después de atravesar una rampa de piedras amontonadas, que culmina  junto a un pequeño muro de piedra, que junto a otros bloques de gran tamaño caídos  a consecuencia del colapso de la zona de la entrada   la separan del resto de la  cueva. Se encuentra razonablemente concrecionada especialmente de  columnas  y estalagmitas.

Recó de s’Oblit

               A través de unos bloques en la zona NE de la Sala Occidental, se encuentra este rincón en parte inundado carente de interés.

Pou Sud

               De 2 x 8 x 3 m el Pou Sud, alcanza el nivel del mar, sin embargo su accesibilidad  a el tanto desde el exterior  como desde algún otro lugar de la cavidad se hace imposible, si exceptuamos la entrada terrestre  desde la zona sur de Sala Occidental, donde un pequeño agujero nos permite adentrarnos en el. Estalagmitas y alguna que otra pequeña columna decoran el lugar.  El fondo se encuentra ocupado por un pequeño lago alimentado por el agua del mar y  que no conecta, al menos de forma transitable, con el resto de la cueva.

Llac de sa Morena

               Con unas dimensiones de 15 x 14 m el Llac de sa Morena, le debe a su nombre a un ejemplar de mourénido, que a fijado su residencia en este lugar. 

Figura 5: Fósil de un strombus  (Foto J. Bermejo)

La profundidad máxima del lago ronda el metro y medio y su fauna  además de la morena  es fácil encontrar pequeñas gambas. El techo de arenisca de la sala que alberga el lago se encuentra en algunos lugares afectados por  la corrosión (Figura 3C). Desde este lugar, la cueva comunica directamente con el mar a través de la Galeria des Polp .

Galeria de sa Creu

Se trata de una galería  sumergida con unas dimensiones de  12 x 12, m en la que el techo en algún punto de la misma no alcanza el metro de altura. A la entrada de la misma desde el exterior, puede observarse una pequeña cruz de acero inoxidable en memoria de un joven que falleció en ese lugar.

Galeria des Polp

               Es la galería por la que se puede acceder de una forma más directa al interior de la gruta, sus dimensiones son 20 x  25 m  la altura en ningún momento baja del metro.              

Fósiles

En distintos lugares de la cavidad donde  el carbonato cálcico no ha recubierto la roca madre, no es difícil encontrar incrustados fósiles, especialmente de bivalvos. En las proximidades del Llac de sa Morena, se encontró un ejemplar perteneciente a un   molusco gasterópodo,  de la familia strombidae (caracola), (Figura 5).

Fauna

La fauna que podemos encontrar en esta gruta es especialmente variada en la zona subacuatica donde hemos podido observar  del orden de los moluscos cefalópodos, sepias y pulpos y de los crustáceos gran cantidad de  gambas,  además de la morena comentada  con anterioridad. La fauna terrestre detectada ha consistido en algunos ejemplares de arácnidos.

Figura 6: A), MARI.  B) XISCO 23-8-83.  C) BIB (Fotos J. Bermejo)

Mantenimiento de las cuevas

               Uno de los problemas más grandes que sufren las cuevas que se encuentran próximas a losa núcleos de población como en el caso de la Gruta de l’Amo en Martí, es la gran afluencia de visitantes, que se adentran en ellas por diferentes motivos como la curiosidad,  en el caso de esta cueva también  para bañarse en el lago en la temporada de estiu,   o simplemente para realizar actos de vandalismo, como es el caso de los  grafitis, del que tampoco de esto se libra esta gruta (Figura 6). No es difícil encontrar en su interior todo tipo de basura, velas, botellas, mantas para pernoctar,  etc…

               Llegados a este punto, cabe preguntarse ¿cual podría ser la solución más aceptable, para que este tipo de cuevas pudieran ser disfrutadas por parte de todos y al mismo tiempo puedan conservarse  buen estado?. No nos toca a nosotros dar esa respuesta, pero alguien tendrá que hacerlo, más pronto que tarde.